martes, 17 de septiembre de 2019

Fiesta mexicana

Me gusta mucho la decoración del mes de Septiembre, por ser fecha de la Independencia. Creo que porque de niña yo disfrutaba mucho estas celebraciones.

En el kinder nos ponían a hacer cadenas de papel de china, un eslabon verde, otro blanco, otro rojo, uno verde, otro blanco y otro rojo... y así hasta formar una larga cadena que luego colgaban por el salón.

También me gustaban mucho los adornos que colgaban en las calles, en los postes de luz y especialmente en el palacio de gobierno y el palacio municipal.

Nunca me ha tocado ver una ceremonia del grito porque evitamos los tumultos, pero me emociona mucho ver los juegos pirotécnicos.

Lo que sí llegué a ver varias veces fueron los desfiles. Los soldados marchando, la música militar con tambores y trompetas. Mis papás me compraban una banderita o un rehilete y mi papá me subía en sus hombros para ver mejor el desfile.

Quizá por eso me gustan estas fechas, porque tengo asociados recuerdos muy lindos. Y cada vez que veo la decoración verde, blanco y rojo, me siento más que patriótica, feliz. 

miércoles, 4 de septiembre de 2019

Hace falta estudiar filosofía

Recientemente he estado siguiendo un canal, que aunque su principal temática es el ASMR, incluye reflexiones acerca de la filosofía, siendo éste el motivo por el cual se ha convertido en uno de mis favoritos. (Les dejaré al final un video para que lo escuchen y sigan el canal).

La filosofía es una materia que ha sido relegada en la educación, al grado de que ha desaparecido de los planes de estudios de la preparatoria, y sólo de casualidad la llegas a tomar en la universidad, si es que tu carrera está relacionada con Humanidades, o como una materia optativa en el caso de otras carreras.

Mi primer contacto con la filosofía fue, en el primer semestre de la universidad y por curiosidad propia. Tenía mucho tiempo libre en aquel entonces así que me iba a la biblioteca, a ver qué encontraba, y me topé con un libro de "Diálogos de Platón". Lo pedí en préstamo a domicilio y en las tardes, después de hacer la tarea, me puse a leerlo y quedé muy interesada por los conceptos que ahí se manejaban. Incluso  me quedaba pensando, ¿qué es el bien? ¿qué es el mal? ¿qué es la justicia? ¿qué es la equidad? ¿qué es la moral? y yo misma trataba de sacar mis propias conclusiones y reflexiones.

Una amiga se dio cuenta que yo leía ese libro y me recomendó otros, incluso me regaló algunos que todavía conservo por ahí.

Me hubiera gustado mucho que en el primer semestre hubiéramos llevado esa materia, así como Ética y Lógica. Sin embargo, la materia de filosofía, como tal, la llevé hasta el décimo semestre, ya cuando estaba terminando la carrera y cuando ya estaba en una etapa en lo que más me importaba era buscar vestido de graduación, hacer los trámites para mi titulación y encontrar trabajo, así que no siento que le pusiera mucho empeño a esa materia tanto como yo hubiera querido.

Y es una lástima, porque el libro que llevamos en ese entonces era de Agustín Basave Fernández, un libro buenísimo, que compilaba las corrientes filosóficas a lo largo de la historia, pero era tan grande y voluminoso y tan poco tiempo tenía para leerlo que sólo estudié lo suficiente para pasar el examen.

Después de titularme, llevé algunas materias de maestría, entre las que se encontraban Ética y Lógica y llevábamos libros de Kant, Descartes y otros filósofos. Para ese entonces yo ya trabajaba, e iba en las noches a la clase, pero ya mi mente estaba tan ocupada en el trabajo que tampoco siento que le hubiera puesto mucho empeño a aprender esas materias, aunque debo decir que el libro de Lógica me gustó mucho, porque me dio un criterio para resolver problemas.

Y a lo que voy es que en la actualidad, vemos noticias en donde jueces ineptos dejan en libertad a delincuentes, por errores en el proceso o por falta de pruebas. Pero ¿saben por qué ocurren estos "errores en el proceso"? Precisamente porque les falta el razonamiento filosófico necesario para tipificar el delito y analizar las pruebas.

Si aplicáramos los principios de la lógica, la filosofía y la ética, se vería una mejor impartición de justicia en el sistema penal, no se violaría ninguna garantía individual y se llevaría un proceso apegado a derecho.

Pero pues qué podemos esperar de los jueces, si como ya les dije, la materia de filosofía la llevamos en un semestre, al final de la carrera, ya cuando ya aprendiste mañas en los juzgados y en los despachos. No,  lo ideal sería  que esta materia la vieras en el primer semestre, cuando tienes 18 años, y tienes todas las ganas y el tiempo para estudiar y para reflexionar y cuestionar.

Claro, dudo mucho que cambien los planes de estudio, pero por eso mismo, los invito a leer filosofía, o a ver videos sobre el tema o escuchar charlas que se organizan en algunos centros culturales.


lunes, 2 de septiembre de 2019

Reseña libro: "El abanico de seda" de Lisa See

En este libro, se trata la historia de dos amigas en la China Imperial del siglo XIX, Flor de Nieve y Lirio Blanco, las cuales se conocieron de niñas gracias a un ritual conocido como "el vendado de pies".

El vendado de pies era una costumbre en la cual, las madres vendaban los pies de sus hijas de 6 años, con el fin de torcer sus dedos y deformar la planta del pie hasta convertirlos en los "pies de loto", es decir, debían medir a lo mucho 7 pulgadas. Esto se hacía porque en aquel entonces, tener pies pequeños era considerado un símbolo de belleza y aseguraba un buen matrimonio. Si no se hacía, entonces la niña era destinada a ser prostituta o sirvienta el resto de su vida.

Así, cientos de generaciones hacían este ritual con el objeto de conseguir un buen marido. Las niñas eran condenadas a ver cómo sus pies se fracturaban y se deformaban, ya no podían salir de casa hasta el día que se casaban. Obviamente, tampoco recibían ninguna clase de educación que no fuera aprender las labores domésticas. Solamente algunas tenían el privilegio de aprender una escritura secreta femenina llamada "nu shu", que les permitía plasmar sus mensajes y pensamientos en cartas y bordados. Al morir, todo eso era quemado. De tal manera que nadie, mas que las propias mujeres sabían la existencia del nu shu, era un arte tan secreto que ni siquiera los hombres lo conocían.

En esta historia, Flor de Nieve y Lirio Blanco se convierten en amigas gracias a un contrato llamado "laotong" que las convertía en almas gemelas de por vida. Era como un "matrimonio por amor entre amigas", más o menos, ya que como sabemos en la antigüedad los matrimonios hombre-mujer eran vistos más bien como un convencionalismo social, una transacción de negocios, no había amor en la pareja más que a lo mucho se podía aspirar al respeto y el buen trato.

Por eso la relación entre amigas era muy importante, ya que de ese modo ellas llenaban ese hueco de amor que tanto les faltaba. Es como hacer un pacto con tu mejor amiga de que siempre serán las mejores amigas toda la vida.

Flor de Nieve y Lirio Blanco se mandaban mensajitos secretos a través de un abanico, de ahí el nombre del libro.

Recomiendo el libro, es interesante, fácil de leer y nos cuenta esa parte de la historia que todos ignoramos, acerca de la costumbre del vendado de los pies. Para que se den una idea de lo que hablo, dejo aquí una fotografía.