domingo, 12 de septiembre de 2010

Reseña película: El infierno

Ayer fui a ver esta película mexicana, que se filmó con el fin de promover un mensaje de denuncia social de lo que actualmente vive nuestro país.

Se llama "El infierno" de Luis Estrada, y que cuenta con un elenco muy bueno, entre los cuales están Damián Alcázar, Ernesto Gomez Cruz, María Rojo y Joaquin Cossío (este último hace una excelente interpretación como narco hecho y derecho).

La trama trata de lo siguiente: Benjamín regresa a México después de pasar 20 años de ilegal en EU. Cuando regresa ve un México más desolador de lo que fue la última vez. Descubre que su hermano menor está muerto y que se había convertido en un sicario peligrosísimo, apodado "El diablo" y que había sido ejecutado por ajuste de cuentas.

A lo largo de la película, Benjamín, en su afán de descubrir la verdad sobre la muerte de su hermano, poco a poco se va involucrando en el ambiente sórdido del mundo del narcotráfico.

Qué puedo decir en esta cinta...... pues.... que me deja la sensación de que vivimos en un país sin justicia. Diariamente vemos en las noticias notas sobre ejecutados, descuartizados, decapitados... y en esta cinta se retrata a la perfección el ambiente que se vive en la actualidad. Autoridades corruptas, iglesia que se hace la que no ve, hombres que matan y cortan cabezas a sangre fría, la venta de drogas, cómo llegan a los negocios a repartir la mercancía y cobrar como si vendieran pan, los ajustes de cuentas entre narcos, escenas de tortura, chicos drogándonse y cuyo sueño en la vida es convertirse en narco, mujeres que se convierten en las putas de los narcos...

Hace unas semanas leí en un periódico un reportaje de por qué México cayó en esta situación. La razón es sencilla: México se olvidó de sus pobres. Se olvidó de la gente humilde, que vive en pueblos y rancherías. Los políticos se preocuparon más por llenar sus bolsillos de dinero que por hacer verdaderos planes para fortalecer la economía y el empleo. La situación se convirtió en una bomba de tiempo. Esos pobres buscaron la manera de salir adelante con los recursos que tenían y ese recurso fue la droga. Los pobres son pobres, pero no pendejos, y aún cuando no cuenten con educación si tienen inteligencia. Formaron células de crimen organizado, que se equiparan a todo un consorcio empresarial. Exportan e importan. Compran y venden. Tienen territorios delimitados y luchan por acaparar nuevos mercados. Con ese poder pudieron obtener lo que ni en sueños hubieran imaginado: dinero, dinero a más no poder, lujos, y sobre todo prestigio.

Tanto poder tienen que ahora, la autoridad que antes los pisoteaba ahora come de su mano. Y esa es la realidad que se retrata en la película.

El problema existe. Tan es así que un día, un muchacho de Sinaloa me comentaba que allá los narcos luego luego se integran a la clase social alta. ¿La manera? Muy fácil. Digamos que una hija de un narco, un día llega y le dice a las chicas de alta sociedad: "Vámonos de fin de semana a Nueva York, yo pago todo."

Las chavas de inmediato aceptan la invitación. Se hacen de la vista gorda y se van con la hija del narco a disfrutar con todos los gastos pagados un fin de semana en los United States.

Y eso es un ejemplo. Lo que quiere decir que los narcos así se introducen en las altas esferas sociales y políticas. Comprando la amistad de la gente.

No tengo idea de si este problema tenga solución. Calderón ha tomado la política de "cortar la yerba mala", es decir, matar a toda esta gente. Lo que no toma en cuenta es que la yerba mala vuelve a crecer si no se le corta de raíz. El problema del narcotráfico es porque existe una desigualdad en la repartición de la riqueza. El desempleo, los bajos salarios, la falta de oportunidades para emprender negocios, la falta de educación, todos esos fueron factores que propiciaron este problema. Por ahí se debería de atacar, en lugar de haciendo festejos absurdos del Bicentenario, porque como bien dice la película, en este Bicentenario no hay nada que celebrar.

Hay en la película una escena metafórica y tristemente poética: El escudo nacional ensangrentado.

Así está México... ensangrentado.

Recomiendo la película, a pesar de que la trama es fuerte, ojalá los haga despertar conciencias.