domingo, 7 de abril de 2013

No he leído 50 sombras de Grey

Intenté leer "50 sombras de Grey". Digo intenté, porque no lo terminé. Apenas leí unas cuantas páginas y nomás estaba risa y risa pensando "no mames".

Es que tanta perfección no es posible. Por eso dejé de ver telenovelas de Televisa desde hace muchos años porque me parecía muy irreal la historia del guapo millonario romántico que se enamora de la chica humilde.  Acá entre nos, me pareció novela de Corín Tellado pero porno.

Aunque he notado que es un hitazo de ventas, y que las viejas (incluyendo a todas mis amigas) proclaman en el Facebook que están enamoradas de él, con la misma histeria con que las pubertas le gritan a Justin Bieber. 

No sé si un día retome ese libro para leerlo nomás para saber de qué se trata. Ahorita mi mente está más ocupada leyendo otro tipo de libros. Tengo pendiente leer un poemario de Baudelaire titulado "Las flores del mal", porque un compañero mío de los del taller de escritura decía que ese poeta era buenísimo. Y empecé a leer unos poemas y varios me resultaron muy cachondos jaja, entonces como que me llamó la atención. También leí "El rapto de la Bella Durmiente" de Ann Rice. Ah no manches, no sé qué tan sadista sea el mentado sr. Grey, pero el libro de Ann Rice.... puuuuuuuuuro sadomasoquismo, no hay renglón donde no haya sexo. Hasta los puntos y comas intensifican el sexo. Pero sexo muy hardcore. Latigazos, humillaciones, desnudismo público, sogas, dildos, y ahí agarran parejo, a hombres y mujeres. No es uno de los mejores libros de Rice, pero no nada más por el tema porque todos sabemos de qué pata cojea la Rice, sino más bien porque el libro es plano, no hay psicología de personajes, no hay un por qué, no hay un clímax coherente y el desenlace es más bien para dar pie a la trilogía. Además el tema pues no es muy apto para mentes sensibles, muchas escenas son tan humillantes que causan repelús.

Pero bueno, todavía tengo más que comentar sobre 50 sombras de Grey, eso será en el post de mañana.