jueves, 30 de septiembre de 2010

Alimentos transgénicos 3era parte.

Continuando con el tema de los alimentos transgénicos, ya ven que ayer les mencionaba sobre el control de la empresa Monsanto sobre las semillas y la agricultura.

Resulta ser que esta compañía, descifró el código genético de semillas como el maíz, la soya, el arroz y otras más. De ahí desarrolló un procedimiento para modificar genes y hacer las semillas más resistentes a herbicidas, de tal modo que cuando utilizaran el herbicida (que ellos mismos venden) se murieran todas las plantas menos las de las semillas genéticamente modificadas. Asimismo, al modificar los genes, se saltaron el proceso de selección natural y de evolución que por lo general lleva años.

Ahora, estarán de acuerdo que con tanta lana invertida en laboratorios y científicos, no iban a regalar sus semillas por buena voluntad ¿verdad? De inmediato echaron mano de abogados y harta lana para conseguir que los congresistas aprobaran la ley que permite la siembra, cultivo y comercializacion de semillas transgénicas. Ah, pero como transgénico se oye muy feo, lo llaman "alimentos nutrimentalmente distintos de forma significativa".

Aprobada la ley, las semillas de Monsanto se registran mediante patentes. Entonces, al tener patentes, tienes que pagar regalías por usarla. Y ya ven que los de Monsanto son re-buenas gentes, ¿verdad? Tons se acercaron a los campesinos gringos para decirles: "oye, te financiamos semillas chingonas, tractores, herbicidas a toda madre. Un paquetazo de super lujo, y a cómodas mensualidades ¿como la ves?"

Y así muchos firmaron sin leer las letras chiquitas que decían que tienen prohibido almacenar semillas para sembrarlas en la otra temporada, que si hacías eso, te iban a meter a la cárcel y a quitarte tus tierras y que te iban a dejar en la calle. Y aguas, porque Monsanto los vigila, se puede meter a tus campos a robarte muestras pa ver si no reciclaste semillas (¿cómo le harán? sepa) O bien, tienen la línea Monsanto en donde el vecino chismoso de la granja de a lado puede echarte de cabeza... Y por si esto fuera poco, las cómodas mensualidades resultaron no serlo, así que tienen a los campesinos con una pata en el pescuezo. Endeudados por los siglos de los siglos.

¿Y qué rollo con las semillas transgénicas? ¿Son buenas o malas?

Aaaah... eso lo verán en el próximo capítulo.

CONTINUARÁ......