domingo, 16 de agosto de 2015

León Guanajuato

Recientemente me fui a un viaje pequeñito, en donde visité, entre otras ciudades, León Guanajuato. Desafortunadamente por la premura y el objetivo del viaje no estuve ahí más que de paso, pero estas son mis impresiones de esta ciudad.
León es una ciudad pequeña, colonial, con un clima fresco. Bueno, al menos para mí que vivo en Monterrey donde 360 días del año estoy a una temperatura de 39ºC desde la mañana hasta en la noche. En León, como en otras ciudades coloniales que he visitado, he notado el esfuerzo del ayuntamiento por preservarlo tal como está, es decir, sus edificios más o menos han conservado la arquitectura colonial original. Las calles están limpísimas, sin ninguna basura tirada, nada, ni un papel, ni una botella de plástico, absolutamente nada. El pasto de las plazas está tan verde y tan recortadito que por un momento pensé que era de plástico pero no. Es césped verdadero. Los árboles están recortados a manera de hongo.

Las iglesias son de estilo barroco, todo por dentro está decorado de manera minuciosa, no hay ni un solo hueco vacío. 
La vida en León es tranquila, al menos en su centro histórico. Poco tráfico, muchas calles peatonales que te permiten pasear y contemplar la ciudad. Quizá lo único desafortunado es la gran cantidad de limosneros e indigentes que andan por ahí, lo que indica que es una ciudad con desempleo y bajos sueldos. 
Fuera de eso, la ciudad tiene su encanto. Es apacible, no está contaminada, como ya dije el aire es fresco y húmedo, el tiempo pasa lento. Definitivamente es una ciudad que yo volvería a visitar, espero que con más calma y más días. Me llevo una buena impresión de este lugar.