jueves, 30 de mayo de 2013

¡Hombres en el colegio!

Yo pasé toda mi infancia y adolescencia en un colegio religioso exclusivo para señoritas. Porque en esas décadas ochenteras y noventeras así se estilaba. Los niños en un colegio, las niñas en otro. Así como la novela "Dulce Desafío" que estaba de moda en aquel entonces. Imagínense a un montón de güerquillas con uniformes azules, calcetas blancas y zapatos tipo choclo. Los hombres estaban prohibidos. Así que la mayoría traía de contrabando los anuarios de sus hermanos, para ver las fotos de los chavos. A falta de Facebook, las niñas nos entreteníamos mirando fotos de pubertos con acné y frenos y cara de mensillos en los anuarios de los colegios de varones. Ninguna de nosotras había dado un beso, ninguna había salido con nadie, pero ahí andábamos imaginando cómo serían las cosas.

Total, que en ese caldero de hormonas femeninas reprimida por las enseñanzas de las monjas en las que decían que tener pensamientos impuros era un pecado mortal.... (ni siquiera yo sabía a qué se referían por pensamientos impuros, pensé que se referían a lo que pasaba en esas novelas de Eduardo Capetillo y Bibi Gaytan) y sumado al hecho de que no había ni un solo varón en el colegio que no fuera el jardinero viejito y el maestro de física que estaba bien feo y bien menso pero que una amiga lo equiparaba a Alejandro Sanz (pfff!!! para nada), llegó nuestra gradución de secundaria.

Para ese entonces yo ya usaba lentes, pero ah, mi vanidad, no me gustaban y los dejé en casa. Ahí voy toda miope a mi graduación de secu, con  mi uniforme azul, mis calcetas blancas y mis zapatos choclos. Y estábamos en la asamblea, todas sentadas, cuando de pronto, las sores anuncian que habrá un número musical.

Entonces las cortinas del auditorio se abren, las luces se encienden, se oyen la canción de "Jitterbug" de Wham... y que van saliendo un montón de chavos trajeados bailando.

Todas nos quedamos atónitas. Los murmullos no se hicieron esperar. ¿Las sores se volvieron locas? ¿Las sores quieren tentarnos al pecado? Hasta que una de mis compañeras gritó: ¡AAAAAAAhhhh! ¡Hombres en el colegio!

Y cual montón de adolescentes pubertas todas nos levantamos y gritamos y nos deschongamos y lanzamos nuestros listones blancos que llevábamos en la cabeza, porque por fin había hombres en el colegio. Todas menos yo vieron el espectáculo.

A buena hora se me ocurrió dejar mis lentes en la casa.

miércoles, 29 de mayo de 2013

Usted no sabe quien soy yo

En las sociedades de primer mundo funcionan a base de reglas. Esas reglas y leyes son acatadas por todos los individuos, sin excepción. Saben que las leyes deben cumplirse, y quien no lo hace, se arriesga a las consecuencias. Si por ejemplo, el autobús sale a las 9:00 y la siguiente corrida a las 9:30, el ciudadano sabe que si no quiere perder el de las 9 debe levantarse temprano y estar ahí a la hora. Si alguien se pasa un semáforo en rojo, sabe que lo pueden detener y sancionar. Todo eso, aunque parezca insignificante, marca la diferencia, pues al vivir en una sociedad donde siempre se cumplen las reglas, eso proporciona mayor seguridad a sus ciudadanos.

Una amiga que trabaja en una agencia aduanal en Texas, me comentaba que ahí tienen horarios muy estrictos para los embarques de mercancía. Pero cuando se trata de enviar mercancía a México, los clientes mexicanos llaman exigiendo que se salten todo ese protocolo y les envíen la mercancía DE YA. Por más que ella les intenta explicar que los embarques están programados y no puede adelantar el envío, los clientes mexicanos empiezan a exigir, aludiendo que si la mercancía no cruza a la hora que ellos quieren "se va a parar toda la producción". Y aunque algunos intentan amenazar con la consabida frase de "usted no sabe quien soy yo..." allá no les sirve de nada. Están tratando con gringos, y esas amenazas verbales los tienen sin cuidado.

Sin embargo, desafortunadamente en México se tiene la costumbre de mover influencias e intimidar a la gente con tal de obtener algo. Y para colmo, ya los bautizaron con nombres de nobleza. "Ladies" y "Gentleman", adornando con tales títulos a gente que no tiene nada de educación.

Tenemos los casos recientes de la famosa "Lady Profeco", la hija del ahora extitular de la Profeco, quien un día ella se presentó a un restaurante sin hacer reservación y exigió una mesa. Ante la negativa de la dueña,(ya que esta dijo que no podía pasar por encima de los demás clientes que sí habían hecho reservaciones) la mujer hizo berrinche, y la amenazó con el "usted no sabe quien soy yo" y horas después, mandó a empleados de la Profeco a clausurar el lugar.

Ahora también tenemos el caso de la "Lady del Senado",  donde la perredista Luz María Beristain llegó tarde al aeropuerto y exigió que se le dejara abordar el avión, a pesar de que el vuelo ya se había cerrado. Nuevamente, sacó a colación el "usted no sabe quien soy yo", y hasta aludió que si llegó tarde era precisamente porque estaba aprobando unas leyes de mejora del aeropuerto.... (ay si, que casualidad, edá).

Pero bueno, el caso aquí es que se quieren saltar las normas, y lo peor es que se alebrestan y amenazan con sus influencias, lo que los hace dejar mal parados ante el mundo, ya no nada más ante los mexicanos.

Sin embargo, no nos vayamos muy lejos. Nosotros, que somos simples mortales, no nos quedamos atrás. También nosotros agarramos el pleito cuando no se nos cumplen nuestras peticiones. Ahí está el caso también de los pasajeros que golpearon a un empleado de Viva Aerobús por no dejarlos abordar. Que si está justificado o no, que si el señor se burló o no, pues hay  maneras para arreglar el asunto sin llegar a los golpes. En el video sí se ve que el empleaducho se ríe, pero una mujer lo cachetea, y peor aun, otro güey pelón se salta a la gente ¡y lo aporrea! ¿De veras esas son conductas de gente civilizada?












martes, 28 de mayo de 2013

Las niñas queremos diamantes

A veces cuando ando paseando por las joyerías, me le quedo viendo a los aretes y gargantillas de diamantes, y me lamento no ser lo suficientemente rica no solo para poder comprármelos, sino para traerlos puestos todo el día. Bueno, ya no digo diamantes, al menos cristal swarosky o ya de perdis, bisutería de brillantes, pero el caso es que a mí me fascinaría traer puestos todos los días algún par de aretes brillantes o una gargantilla.






Y es que por ser clasemediera proletariada y para colmo, vivo en la ciudad donde no te pueden ver ni una joya fina porque te la arrancan, me tengo que conformar con ponerme aretes de plástico todos los días, o cuando mucho un par de arracadas de oro de 14k tan simples y tan sencillas que ni se ven, nomás porque no se vea la oreja pelona. Solo en muy esporádicas ocasiones, cuando se casa alguien, saco de mi cajón un par de aretes de fantasía de brillantes, y me doy el gusto de que la luz de refracte como arcoiris.

A veces me dan ganas de ponérmelos de diario, pero también las reglas del buen vestir dicen que los brillantes no se usan para el diario (a menos que seas princesa o reina). Pero no, yo quiero brillantes, en la cara, en el cuello, en los brazos... Los diamantes fueron hechos para la mujer, para que se luzca, para que brille. Porque yo nunca he visto a un hombre con una tiara de diamantes jeje.

Así que como decía Marilyn Monroe, los diamantes son los mejores amigos de las chicas. Si me los quieren regalar, por mí encantada.

lunes, 20 de mayo de 2013

Entrevista en la radio

Hoy me van a entrevistar para el programa MUJER, en la estación 1310 de AM. Grupo Radio Alegría.

Es a las 12:00 pm

Voy a hablar de la novela, y todo lo que tuvo que ver con el proceso de creación de la misma.

Ahí los espero.


sábado, 18 de mayo de 2013

PRESENTACION LITERARIA

Hoy es mi presentación literaria.

De la novela "El vendedor de Abrazos"

Hora: 6:00 pm

Lugar: Fondo de Cultura Económica 
Ave. San Pedro 222 Nte. Col. Miravalle, Monterrey, N.L. 

ENTRADA LIBRE   

Princesos

A veces no entiendo esa manía que tienen las mujeres de feminizar a los hombres, que ahora les ha dado por llamarlos "princesos", un término que suena bastanta mamila.

Quizá esa fijación provenga de que esas mujeres en su infancia tenían el Ken de la Barbie al que podían tratar, obviamente, como su muñeco, poniéndole ropita y zapatos, no sé. Pero la cosa es que el término se está popularizando mucho. Ni siquiera yo entendía qué era princeso, (¿qué lo correcto no es príncipe?). Pero no, no es príncipe, porque el príncipe es un macho varonil, caballero de dorada armadura en un corcel blanco que viene a rescatar a la princesa con valor y arrojo.

El "princeso" en cambio, es un término que se usa para denominar al hombre que no tiene reparo en llorar y expresar sus sentimientos.



Estoy de acuerdo que vivimos en culturas machistas, y que los hombres reprimen sus sentimientos, pero me molesta cómo banalizan con ese término cursi y rosado de "princesos" a los que sí son abiertos en expresar sus emociones.

A diferencia de las mujeres, que lloramos por todo, y más cuando estamos menstruando, cuando un hombre llora es porque realmente está pasando un sufrimiento muy fuerte. El llanto masculino es tan intenso, tan desgarrador, precisamente porque no es frecuente, y porque cuando sucede él está experimentando un dolor y una pérdida. No lloran por cualquier tontería.

Me ha tocado ver hombres llorando cuando se enteran de la muerte de sus padres. Se desmoronan por completo. Me ha tocado ver lágrimas de coraje y tristeza cuando se enteran que su novia les fue infiel. También me ha tocado ver en las noticias padres que lloran cuando les secuestran a sus hijas y no saben su paradero. Esos son los verdaderos hombres, que en su virilidad y fortaleza también tienen momentos de sufrimiento y dolor y necesitan desahogarse. De veras, esas lágrimas de hombre son lágrimas valiosas, y se me haría muy injusto burlarme de esas lágrimas o trivializarlas con un término tan absurdo y afeminado como "princesos".


jueves, 16 de mayo de 2013

Entrevista en Vox.com.mx

Les comparto la entrevista que me hicieron para el portal de Vox.

Lector en las calles: El erotismo de un abrazo.


MONTERREY, Nuevo León. México. 16 de mayo 2013. Carlos CallesLos actores en la fotografía de la portada me parecieron sobreactuados, pero la imagen me comunicó un mensaje: un hombre vende abrazos, las mujeres lo contratan, algo en la mezcla sale mal, el hombre aprenderá una lección. No compré la novela. No traía dinero. Pero me aseguré de recordar el título: “El vendedor de abrazos”.
Días después conocí a la autora de esta novela romántico-erótica, Rocío Ramírez Castillo. La conocí porque Rocío es emprendedora, y se anda moviendo en la promoción de la novela. “Llamé al Canal 28 y van a transmitir una entrevista que me hicieron sobre el libro”, me dijo después la escritora regiomontana.
Este sábado 18 de mayo a las 6 pm, Rocío Ramírez Castillo presentará el libro junto a Elia Martínez-Rodarte en la librería del Fondo de Cultura Económica. Para que no falten.
Nos contactamos a través de un conocido mutuo. Contesté el correo: “leeré tu novela y después te entrevisto”, propuse. Y así fue. Nos vimos en un Italian Coffee. Pedí un cappuccino con cajeta que no tenía el sabor que recordaba (casi siempre resulta en decepción comparar la realidad con los recuerdos). Llegué algunos minutos antes de la hora pactada. Ella llegó puntual.
“El vendedor de abrazos” narra la historia de Julio, un joven de 25 años graduado de la UANL, desempleado,  y con amigos que no son amigos sino compañeros de borrachera. Cierto día Julio se reúne con Alma, una amiga de su último trabajo que atraviesa una situación emocional complicada. Se abrazan. Alma comenta lo bien que se siente después del abrazo: “Eres un buen abrazador. Deberías dedicarte a esto”. Un par de semana después, y gracias a la complicidad de Alma, Julio tiene negocio propio sin proponérselo.
“El tema central de la novela es la soledad de las mujeres que no tienen pareja, y que a veces por el ritmo que impone la ciudad no permite socializar”, me explicó Rocío. A la larga, sin embargo, la soledad no es sólo de las mujeres, sino también de los hombres, representados por Julio y sus amigos, quienes se aíslan, quizá involuntariamente, por las mentiras que utilizan para construir sus vidas sociales.
Rocío describe la novela como una mezcla de romance y erotismo, y está narrada en primera persona, desde la voz de Julio. El tono del lenguaje de los personajes masculinos en la obra simula el cotidiano que escuchamos en Monterrey.
–A ver, pendejos, eso no es nada –dijo Israel–. Yo me cogí a una vieja, compañera del jale, que tiene unas tetas y un culo… N’ombre, ni se imaginan. Yo le echaba indirectas, pero ella siempre me daba el avión. Le llamaba, le dejaba mensajes de texto, y un día me pensé: “a la verga, ya le voy a decir”. Así que le dije que me parecía hermosa, que sólo pensaba en ella y todas esas madres. Total, que un día la invité a salir. Y así anduvimos, en el carro, primeros besos, luego agasajes, la dedeaba, y ya estando bien caliente, me dio una mamada de lujo. Entonces ella me dijo que ahora me tocaba a mí, así que me la llevé a un motel, y pos que cogimos bien chingón, dejó que le hiciera de todo. (Pueden leer más fragmentos en: http://www.elvendedordeabrazos.com/)
Le pregunté a Rocío cómo había hecho para recrear el tono del regiomontano estúpido, machista, mentiroso, que exagera como si se tratara de un acto heróico el tamaño de las partes femeninas. “Fue muy difícil”, dice Rocío entre risas, “salía la voz muy femenina, pero quise escribir en primera persona porque siento que se crea un intimidad con el lector”.
“Tuve que hacer la referencia a “Cincuenta sombras de Grey”, siendo la de Rocío, también, una novela erótica.”
¿Le preocupa o le alegra la conexión que se pueda hacer con el bestseller? “Yo escribí la historia antes de que saliera Grey, cuando empecé a escribir, el género no estaba de moda. No me preocupa la conexión porque Grey es el hombre perfecto, una especie de príncipe azul. Julio es un hombre real, de carne y hueso. Son personajes muy distintos. Pero podría beneficiarme la comparación, si a las mujeres les gusta la literatura erótica, entonces les puede agradar mi libro”, dice con una sonrisa.
Sobre lo que existe detrás de la historia, Rocío dice que tiene un sustento real, o al menos de mito urbano, que escuchó gracias a un amigo: “Él no estaba seguro, le había llegado el rumor de que un ex compañero de la Uni se dedicaba a vender abrazos”, concluyó sin querer entrar en más detalles.
“El vendedor de abrazos” es la primera novela de Rocío Ramírez Castillo, quien se formó como escritora en los talleres del Museo MARCO. El libro está a la venta en librerías La Ventana y también en Amazon, y les recuerdo que se presentará en la librería del FCE el sábado 18 a las 6:00 pm.
@charmarlos


http://www.vox.com.mx/2013/05/lector-en-las-calles-el-erotismo-de-un-abrazo/

La presión social

Acabo de leer una noticia sobre algo que ocurrió en Colombia. Allá entre los adolescentes, existe un juego llamado "Carrusel" o "Ruleta Sexual", que consiste en que ya pasados de copas, todos desnudos, hacen una rueda, se ponen a bailar, y entre la bailadera los hombres van penetrando a las chavitas, y el primero que eyacula pierde.

Lo malo es que ya van varias menores de edad que salen embarazadas en esos jueguitos y ni saben quien es el padre. Y ellas jugaron pensando que por dejar que les metieran la puntita un ratito no iban a quedar embarazadas.... :S

Los papás de una de las chicas (que fue la que dio pie a esta noticia) están devastados. "Creíamos que la habíamos educado bien", dijeron.

No me voy a poner a hablar sobre la sexualidad ni nada de eso, pues no me quiero poner en papel de moralista.

Solo quería mencionar algo que me llamó la atencion.

"El problema que tienen muchas de las chicas que participan, es porque se sienten presionadas, o porque sus amigas lo hacen. Incluso porque los mismos chicos son los que piden que jueguen. Las niñas, en muchos casos juegan porque no quieren quedarse apartadas del grupo."

Presión social, al final de cuentas. No son decisiones pensadas, sino que son decisiones para quedar bien con la gente, con las amigas, con los chavos. ¿Qué pasa si no lo hacen? Pues que las chavas se exponen a la burla de sus compañeros, a que las marginen por no ser aventadas o lanzadas. A que les digan "pues ya no te quiero" o "ya no quiero ser tu amigo", a que ya no las inviten a las fiestas porque no se ponen en plan de flojitas y cooperando. Y pues a ningún adolescente le gusta que lo aíslen.

Yo creo que además de educar a un hijo o hija entre lo que está bien y lo que está mal, valdría bien educarlo para que no se deje influir por la gente. Que tenga seguridad en sí mismo para rechazar invitaciones a cosas que le hacen daño, que se guie por sus propias convicciones y no por el qué dirá la gente.






miércoles, 15 de mayo de 2013

Invitación a la presentacion literaria

 
 Bueno, este es el cartel de mi presentacion. No se ven bien los datos, pero aquí está.

PRESENTACION DEL LIBRO EL VENDEDOR DE ABRAZOS de Rocío Ramírez Castillo

SÁBADO 18 DE MAYO 
18:00 HORAS
ENTRADA LIBRE

LUGAR: LIBRERIA FRAY SERVANDO TERESA DE MIER DEL FONDO DE CULTURA ECONOMICA
Ave. San Pedro 222 Norte, Col. Miravalle
Monterrey, N.L. 
Informes al Teléfono: 83 35 03 19 y 71 con Luis Valdez


Mi presentadora será Elia Martínez-Rodarte autora del libro "Ivaginaria"

Habrá convivio con botana y música. ¡Ahí los espero!
   
  

 







Entrevista que me hicieron en la tele

Por si no pudieron verme el lunes, esta es la entrevista que me hicieron para el programa Imaginarte


lunes, 13 de mayo de 2013

Hoy salgo en la tele

No se lo pierdan, en el canal 28 TV NL, programa Imaginarte, a las 7:00 pm.

Me hicieron una entrevista sobre la novela.


domingo, 12 de mayo de 2013

Por qué batallo en vender libros electrónicos

Mi transición hacia los libros electrónicos comenzó cuando entré a trabajar. En esos ratos después de la comida, en que me tomaba unos minutos para descansar, como yo no tenía internet como el resto de mis compañeros, yo tenía en un diskette de 3 1/2 una copia de "Cumbres Borrascosas" que yo había bajado en el club de informática de la universidad. Me ponía a leer una página diariamente, en silencio o a veces acompañado con música de Coldplay, mientras descansaba antes de reanudar mi trabajo. Después un compañero me pasó, también en un diskette, un libro en ese entonces desconocido pero que meses más tarde se convertiría en un fenómeno de mercadotecnia: "Harry Potter y la piedra filosofal". De ahí seguí con "El Hobbit" y como seis libros de Paulo Cohelo. (De acuerdo, yo también leo literatura comercial).

Y conste que la pantalla donde los leía era de esos monitores grandotes, pesados, sin protección y con colores chillantes. Y no se me hizo pesado ni cansado ni tedioso ya que todo mi trabajo era estar precisamente 9 horas frente a una pantalla ¿Qué diferencia había con dedicarle 20 minutos a leer un capítulo? Y lo hacía por dos razones: porque si me traía un libro físico para leer en la oficina, me dirían algo como "¿Qué? ¿No tienes trabajo? ¿Por qué andas perdiendo el tiempo leyendo?", o bien "¿Por qué te pones a leer en lugar de platicar chismes con nosotros?"  Y la segunda razón, porque a veces no tenía suficiente dinero para comprarme un libro de $300 pesos, sobre todo los best sellers, entonces buscaba la edición electrónica.

Fue entonces que mi transición del libro físico al libro electrónico se dio natural, como un fenómeno de adaptación a la nueva era, tan es así que muchos libros que leo los tengo en formato electrónico. Estoy tan acostumbrada a trabajar frente a una computadora, que ya es algo natural en mí leer en una pantalla. Y estoy segura que el 90% de las personas oficinistas pasan más tiempo frente a una pantalla que frente a un informe impreso.

Por eso, no entiendo esa reticencia de la gente a adquirir libros electrónicos, si en su vida diaria conviven con pantallas casi todo el día, llámense computadoras, laptops, celulares, ipads, iphones, etc.

Le ofrecí a varios blogueros mexicanos especializados en subir reseñas de libros si podían hacerme una reseña en su blog sobre mi novela. Les ofrecí enviarles el e-book. De diez blogueros, solo me respondieron 3, y de esos 3 solo 1 aceptó el reto. Los otros dos se negaron porque "no les gusta leer libros electrónicos pero tampoco tienen dinero para comprar el físico y pagar el envío".

Algo que no comprendo, porque si alimentan su blog casi diariamente (y sus páginas están muy elaboradas, con imágenes, videos, etc). significa que sí usan las computadoras, que para ellos no es una herramienta extraña. Pero supongo que es parte de una generación que se crió con libros en papel, y por eso tienen esa nostalgia por el libro, y cuando alguien se aferra a la nostalgia, difícilmente se adapta a los nuevos tiempos.

Ahora bien, imprimir en papel no es tarea fácil. Se requiere de mucha inversión, y aún y cuando ya tienes el libro listo, recién impreso, no cualquiera está dispuesto a pagar por él. Tan es así que los blogueros literarios me arguyeron que no tienen dinero para comprarme la versión impresa. Entonces ¿qué hago? Me dejan sin opciones. No les gusta la versión electrónica pero no quieren comprar la versión impresa. y tampoco puedo regalar la versión impresa, porque invertí mucho dinero en ella. (Lo lamento, lectores, pero los escritores también tenemos deudas como todos los seres humanos, y necesitamos dinero para vivir).

Así que bueno... dejaré que las cosas vayan fluyendo a su tiempo. Quizá todavía falta mucho para ser como Estados Unidos y Canadá, donde mucha gente baja libros electronicos en sus kindle y Ipads, y en los metros van leyendo. Amazon.com ha tenido mucho éxito con la venta de libros electrónicos, pero en su versión en inglés. Aquí en lo que se refiere a México, todavía falta mucho para que la gente abandone sus prejuicios sobre el libro electrónico... irónicamente, porque somos un país donde todos tenemos por lo menos una computadora en casa y cargamos con celulares y ipads...

Y bueno. Aprovecho para recordarles que mi novela se encuentra disponible en los siguientes lugares.

En AMAZON

Y en LIBRERIA LA VENTANA  (Aquí pueden adquirir la versión impresa y tienen envío a domicilio).

Y también en la LIBRERIA UNIVERSITARIA DE LA UANL.






viernes, 10 de mayo de 2013

Madres solteras

Según el INEGI, en México 42% de las madres laboran fuera del hogar y el 97% mezclan su jornada laboral con el quehacer doméstico; 72.4% de este grupo son solteras. Esto implica que el vínculo maternal sea reforzado en el poco tiempo que se puede dedicar a los niños o jóvenes, a través de una buena comunicación, tolerancia y respeto sin descuidar el cariño que se tienen uno al otro.

Me alarma mucho el número de madres solteras y divorciadas, porque no debe ser nada fácil criar hijos sola. De por sí ser madre es una tarea muy demandante, peor aún cuando tienes que separarte de los hijos para irte a trabajar porque no hay de otra. Se resignarán a dejar a sus hijos encargados en guarderías o en el mejor de los casos, con su abuela materna, pero estas mamás no podrán dar de lactar a sus hijos, solo los veran unas cuantas horas en la noche, cuando ya están cansadas y necesitan hacer el aseo de la casa, preparar la cena y los lonches del día siguiente.

En verdad es de admirarse que una mujer tenga la fortaleza para abandonarse a sí misma y sacrificarse por el bienestar de sus hijos. Pero me parece muy lamentable que esto se tenga que vivir en la actualidad, que los hombres brillen por su ausencia en la crianza de un hijo. No hay excusa que valga para que abandonen a una mujer con tamaño paquete. Que si la relación no funcionó, que si solo fue sexo casual, lo que sea, pero no es justo que dejen a la madre toda la labor de educar, cuidar y mantener a un hijo.

Asimismo, falta también modificar las leyes laborales en favor de los derechos de la mujer y del menor. Que se les otorguen incapacidades por maternidad mínimo de 6 meses (en Suecia les dan 480 días de incapacidad y en Noruega 392 días), a fin de que puedan amamantar y dar los cuidados necesarios que requiere un bebé. Que haya opción de tomar trabajos de medio tiempo y bien remunerados. Que se les otorguen subsidios en caso de que los bebés nazcan con alguna discapacidad o contraigan una enfermedad seria como cáncer. En fin, todavía falta mucho para lograr una mejor condición de vida en la mujer, especialmente de las madres solteras.

En fin, les deseo a todas las mamás un feliz día.



jueves, 9 de mayo de 2013

lunes, 6 de mayo de 2013

Mobbing laboral... el bullying de los adultos

Bueno, como les decía hace algunos día, me llegan de OCC mails con temas sobre el trabajo. El tema que me llegó hoy es sobre el acoso laboral o Mobbing laboral.

Ya ven que ahorita todas las escuelas están en la lupa por el Bullying entre niños... pues esto es la misma situación, pero entre adultos, en las oficinas y empresas.

Les voy a transcribir lo que dice al respecto.
"La Organización Mundial de La Salud define mobbing como una situación de violencia o acoso recurrente dirigida hacia una persona con el objetivo de aislarlo de un grupo laboral; se caracteriza por conductas crueles y hostiles que se convierten en una tortura psicológica para la víctima. Algunas manifestaciones pueden ser:
1. Rumores y Calumnias
2. Aislar o excluir a una persona
3. Insultos o motes
4. Ignorar o no dejar participar a una persona
5. Amenazar
Las consecuencias para las víctimas de este tipo de abuso se traducen en problemas psicológicos como angustia y depresión; físicos como pérdida de peso, dolores de cabeza o insomnio; laborales como caída del rendimiento, absentismo, y sociales como problemas familiares y pérdida de relaciones interpersonales.
Pero también las empresas pierden: el mobbing es una de las causas principales de la baja productividad, el absentismo y la rotación de personal. Por ello cada vez más compañías implementan programas internos para denunciar y prevenir conductas laborales inapropiadas, y por su parte, instituciones de protección a los derechos de los trabajadores abren espacios para denunciar abusos."

 
Bueno, algo que no me gusta de la cultura mexicana es ese ánimo de estar chingando al prójimo. De veras, hay gente que lo trae desde la niñez. Lo malo es que entre adultos nos callamos más las cosas, porque con tal de no armar escándalo y que no nos corran,  aguantamos, y aguantamos, y aguantamos, hasta que llega un día en que ya no lo soportas y empiezas a odiar el trabajo. Hay muchos tipos de mobbing, desde el compañero que se para en tu escritorio con cualquier excusa pendeja solo para verte las bubis, la compañera que te hace caras cuando vas a pedirle un documento, la que te tira al lucas cuando le pides una información de carácter urgente, la vieja que siempre está chismeando y amarrando navajas, el compañero que pone apodos, el jefe o jefa que te gritonean...

Y uno aguanta vara. Porque en nuestra casa nos enseñaron a ser responsables y respetuosos, y a confiar en la justicia divina. ("cuando se muera, Diosito le pedirá cuentas") Pues sí, pero mientras eso sucede seguimos soportando. Porque también hay quien nos quiere hacer parecer como Quijotes de la Mancha diciéndonos esa frase choteada de que "si los perros ladran, señal que andamos"... pero lamento decirles, estimados lectores dos cosas: primera, no somos Quijotes. Segunda, que esa frase no viene en el Quijote

Pero volviendo al tema. ¿Por qué ese ánimo de joder en el trabajo? De por sí tenemos que pasar 2/3 de nuestro día en la oficina. Entonces de perdido hacer más llevadero el día, llevársela tranquila, relax. ¿Qué les cuesta?


En fin. Lo que me sorprende del artículo es más bien la enorme cantidad de comentarios donde la gente cuenta su propia experiencia, de cómo sufrireron mobbing laboral. Y algunos hasta dan nombres de empresas y de personas. Increíble que esto esté tan generalizado. En la mayoría de los casos, la única solución que encontraron esas personas fue renunciar, porque se quejan que los del depto. de RH nunca tomaron cartas en el asunto.

Qué lamentable que así se tenga que trabajar en México.

Por eso, estimados lectores, he traído para ustedes esta solución contra los abusones en el trabajo.







Tu propio guarura bien mamey con ametralladora. jejeje.





viernes, 3 de mayo de 2013

Cuánto dañamos al planeta

Este animal es un rinoceronte negro.


Ya no existe en el planeta.

Oficialmente se le declaró extinto el día de hoy.

Todo gracias a la ambición desmedida del hombre, a los cazadores furtivos que los mataron para quitarles los cuernos y comercializarlos en el mercado negro.

Estos son los resultados. Una especie que ya no volveremos a ver en este planeta.

La noticia la pueden leer aquí.


miércoles, 1 de mayo de 2013

Reflexiones sobre el día del trabajo

OCC me llena de correos donde vienen artículos acerca de cómo debo redactar mi currículum y cómo debo responder a las entrevistas. En un ambiente laboral como el de Estados Unidos, esos consejos serían la llave del éxito. Pero aquí en México lo dudo mucho, y no soy la única que piensa así. Basta leer las anécdotas que los lectores de ese portal incluyen en la sección de comentarios.

La cuestión es la siguiente. OCC sugiere no poner la edad en el currículum. Perfecto. Pero los reclutadores tarde o temprano se dan cuenta qué edad tienes. En primer lugar, por la experiencia laboral. Si pones que tu primer trabajo fue en 1997, obviamente empezarán a sacar cuentas. En segundo lugar, al momento de la entrevista. Ahí ya te verán físicamente e incluso te preguntarán la fecha de nacimiento y ahí no hay escapatoria, hay que responder. En principio se supone que nadie debe ser discriminado por la edad, sexo, o estado civil, pero eso en Estados Unidos. Aquí estamos en México, señores, y en México la edad es un factor muy importante. Es lo que determina la diferencia entre ser contratado y ser rechazado.

OCC también recomienda señalar tus múltiples estudios, maestrías, doctorados, diplomados, y todo lo que hayas aprendido en la vida. Nuevamente, si viviéramos en Estados Unidos, con tanto estudio hasta te tenderían la alfombra roja. Es más, en países como Canadá, los profesionistas son vistos como personas cultas que pueden acceder a empleos bastante bien remunerados. Un contador allá es casi casi, un millonario. Aquí en México, entre más estudios más se cierran las puertas, porque te consideran "sobrecalificado". Piensan que pedirás un sueldo muy alto, y aunque te doblegues y pidas un sueldo equivalente a lo que gana un albañil por semana, si tienes doctorado, no te contratan. Esa situación se resuelve por medio de recomendaciones de gente poderosa, es decir, palancas. Aunque si tienes palancas, ni siquiera necesitas tanto doctorado...

Ahora bien, OCC se empeña en dar una serie de consejos de cómo responder a las entrevistas laborales. Y ese es el punto que más desazón me causa. Porque al final de cuentas, no puedes ser sincero. Según los tips de OCC, todo se resume a que tienes que decirles a los reclutadores lo que ellos quieren escuchar. Entonces tienes que aprenderte esas respuestas para no regarla en la entrevista. y si ellos te preguntan "¿le gusta trabajar bajo presión?", aunque te mueras de ganas por decir: "no señor, no me gusta. Yo prefiero un trabajo tranquilo donde pueda salir a mi hora para ver a mi familia", tienes que poner sonrisa de chimpancé y responder: "Sí, señor, me encantan los retos." Todo con tal de quedarte con la chamba. Es la verdad.

Irónicamente, al aceptar esas condiciones de trabajo bajo presión y un sueldo por debajo de tus expectativas, te genera mucho estrés, y según los últimos estudios, el estrés genera un desconentento en la empresa, baja productividad y ausentismo.

Así que ni las empresas ganan ni los empleados ganan. Habrá que cambiar el modo de reclultamiento laboral en México, y ser un poco más como Estados Unidos o Canadá, donde aceptan al empleado por sus conocimientos y experiencia, no por su juventud ni por su tolerancia a ser burro de molienda de largas jornadas como en México.