martes, 28 de enero de 2020

La rifa del avión

Generalmente soy apolítica, no me pongo a hablar mucho sobre estos temas. Pero a veces suceden tantas cosas tan absurdas en México que es imposible no hablar de ello.

Resulta que nuestro presidente, López Obrador, dijo desde un inicio de su gobierno que pondría a la venta el avión presidencial, para sacar lana que se utilizaría en otras obras sociales.

Desde un principio esa propuesta me pareció absurda, porque ¿quién compraría un avión de esa magnitud? Ni siquiera las aerolíneas se apuntaron, mucho menos los particulares.

Si al ver el desinterés por comprar semejante armatoste, el presidente hubiera reconocido que "ok, no se pudo vender, pero va a seguir al servicio del gobierno", yo hubiera dicho "bueno, no hay problema".

La cosa es que se amachó con la idea, y no quitó el dedo del renglón, y se le ocurrió rifarlo. Sí, rifarlo. A $500.00 el boleto.

O_O

¿Para qué?

¿Y el que se lo gane qué va a hacer con él? Ni siquiera va a tener un hangar donde "estacionarlo". Tampoco va a tener recursos para operarlo.

Me recuerda ese episodio de Los Simpson donde Bart participó en un programa de radio y le dieron a escoger el premio y el se empecinó con que quería un elefante.

Al final lo obtuvo, pero su familia no podía mantenerlo. No cabía en el patio, no tenían con qué alimentarlo, causaba más daños que beneficios.

Pues algo así pasará con el ganador del avión. O eso me imagino.

Yo que AMLO dejaría este tema por la paz.