domingo, 28 de octubre de 2012

Reseña película: Ruby Sparks, la chica de mis sueños


¡Oh, hace tanto tiempo que no veía una película que me impresionara y sobrecogiera al mismo tiempo! Me sentí tan identificada con el protagonista... en muchas, muchas maneras.


La película se llama "Ruby Sparks, la chica de mis sueños", trata de un escritor famoso, pero solitario, (interpretado genialmente por Paul Dano, quien le imprime al personaje un toque a lo Woody Allen, excéntrico y al mismo tiempo inteligente).

Después del éxito avasallador de su primera novela, Calvin está bloqueado, es incapaz de escribir algo nuevo, además que tampoco consigue encontrar novia. Por consejo de su psiquiatra, empieza a escribir acerca de cómo sería su novia ideal.

Días después, Calvin descubre que todo lo que escribió acerca de su pareja ideal, se materializó, pues mágicamente conoce a Ruby, una pelirroja alocada, divertida, artística, y que lo ama apasionadamente. Calvin está feliz, hasta que de pronto las cosas se complican.

El guión de la película está muy bien estructurado, los personajes y las actuaciones buenísimas. Un clímax estremecedor, egoísta, cruel, que no puedes despegar los ojos de la pantalla, y un final que da un twist a la trama y es sorpresivo. En verdad se las recomiendo bastante. Yo le doy cinco estrellas. 

(Advertencia: lo que digo a continuación puede ser spoiler, así que antes de continuar leyendo, les recomiendo que primero vean la película).

Les decía que me identifiqué con el protagonista, precisamente porque yo ahorita atravieso una situación similar. No tengo pareja, soy una persona solitaria, y al mismo tiempo, estoy intentando escribir una novela. Ya hace mucho tiempo he oído mucho acerca de la Ley de Atracción, y me han recomendado escribir acerca de mi hombre ideal. Hice un borrador, y todavía no se me materializa el novio. Pero hay una cosa rara que sucede al escribir. En los talleres lo denominan "la voz del personaje". Quiere decir que a veces definimos un personaje con cierta psicología, y al momento de estar escribiendo, el personaje va cobrando vida propia, habla por sí mismo, y hace cosas que no teníamos planeado que hiciera, hasta que se convierte en un ser independiente del escritor. Es un fenómeno que sucede muy seguido, y muchos escritores lo han experimentado. Pero al mismo tiempo, está nuestro ego de escritor, el creernos que somos dioses en nuestro universo diminuto.

Lo más chistoso es cuando te topas a los personajes en la calle, como me ha sucedido a mí. Así que bueno, tomando en cuenta todo lo anterior, le voy a echar más ganas a escribir cómo sería mi novio ideal. Chance y en una de esas ya les cuente aquí que ya existe en carne y hueso.