martes, 13 de septiembre de 2016

Revisiones electrónicas del SAT

Lo siento, amigo, amiga, el SAT sabe lo que ganas y sabe en lo que gastas. Con la contabilidad electrónica todos esos datos ellos los tienen al alcance de un clic.

Tan es así que en su portal de noticias aparece esta pregunta.

1. ​​¿Qué son las revisiones electrónicas? 
Una revisión electrónica consiste en examinar conceptos o rubros específicos a través de medios electrónicos, desde la notificación hasta la conclusión. Se basan en la información de facturas electrónicas, la contenida en bases de datos del Servicio de Administración Tributaria y la proporcionada por otras dependencias y terceros.
Se inician con una notificación en el Buzón Tributario. El contribuyente tiene 15 días hábiles para aportar pruebas o información y desvirtuar las observaciones; corregir su situación fiscal, presentar sus declaraciones y realizar los pagos adeudados, o tramitar un acuerdo conclusivo a través de la Procuraduría de la Defensa del Contribuyente.


Esto quiere decir que podrán notificarte por el buzón tributario que te van a auditar. Y que tendrás 15 días para demostrar que andas bien, en orden y al día, o en su caso, corregir tus declaraciones y pagar lo que debes.

Y sí, por eso me resulta absurdo enterarme de situaciones donde el Gobierno licita con proveedores que tienen su domicilio fiscal en un tejabán en una colonia tipo Fomerrey, les paguen millones de pesos por un servicio que obviamente no prestarán porque el negocio ni siquiera existe, y luego digan a la prensa "es que yo no sabía con quién estaba contratando".

Como hace días, que el periódico El Norte evidenció que el alcalde de Monterrey Adrián de la Garza contrató los servicios de una App para no sé qué, y cuando los reporteros fueron a investigar si el proveedor realmente existia se dieron cuenta que el domicilio fiscal era una casucha abandonada. Cuando le cuestionaron al Alcalde por qué contrató con ellos dicho pago millonario, el respondió "yo no sabía que no existía". 

Aasssh, como no van a saber, si el gobierno nos tiene bien fiscalizados. Lo que pasa es que precisamente escogen a esos negocios chuecos para hacer sus transas de desvío de recursos.

domingo, 4 de septiembre de 2016

Si no te busca no le gustas

A veces es muy difícil entender este concepto. Sobre todo cuando ya te has clavado con esa persona. Y cuesta trabajo entender las señales (o más bien la ausencia de ellas) para comprender que simplemente no le gustas a esa persona.

La primera, es sencilla: Si no te busca, no le interesas.

En esta época hay más de mil maneras para encontrar a la persona que te interesa. Tengo amigos que no tenían ni un solo dato de la mujer que les interesaba, más que su nombre, y se pasaron buscándola en Facebook entre cientos de personas que se llamaban igual, hasta que dieron con ella. Así que si tú le diste al susodicho tu número de celular, tu Facebook, tu e-mail, y aún así no es para mandarte un mensaje, o si eres tú la que siempre le manda los mensajes porque pueden pasar días sin que él tome la iniciativa, significa que no le interesas.

La segunda: Si pone excusas para salir contigo, no le interesas.

Pienso yo que si le gustas a un hombre,  Aprovechará cualquier oportunidad para verte. Pero si te topas con hombres que a pesar de que los invites a salir te salen con excusas como: "voy a cenar con mis amigos", o "voy a jugar fútbol", o cualquier otro pretexto y no te invita a salir, significa que no le interesas. A los hombres les gusta decir excusas cuando no quieren ver a una mujer llorar, así que para ellos es más fácil mentir que decir una verdad que los hará quedar mal parados.

Entiendo que los hombres pueden estar ocupados, trabajando o estudiando, sin embargo, cuando eso pasa el que de veras quiere andar contigo te ofrece una alternativa. Por ejemplo: "no puedo hoy, pero mañana paso por ti y vamos a cenar". Ahí sí, da a entender que sí le interesas, que no quiere perderte. Pero si no hace eso, entonces no.

La tercera: Si no te extraña, no le interesas

Otras veces nosotras somos las que estamos ocupadas, las que no llamamos o mandamos mensajes. Pero si él no te extraña ni te llama o te escribe para preguntarte cómo estás, significa que tampoco le interesas. El que de veras quiere andar contigo se pone las pilas para que no salga otro que se la gane.

La cuarta: Si te esconde de los demás, no le interesas.

Otras veces, toca que en privado son muy apasionados, muy intensos, pero cuando te sacan el consabido "pero no se lo digas a nadie", ahí ya está claro que no le interesas, al menos no para novia. (Para un acostón tal vez sí). El que quiere andar en serio con una mujer no la va a tener en la clandestinidad, ni en secreto, como si se avergonzara de ella. Al contrario, buscará de inmediato hacerlo público. Tengo amigos que se toman fotos con sus novias apenas y ellas les dicen que sí, y las suben de volada a Facebook e Instagram. Y aceptan ser presentados ante la familia y los amigos. Entonces si el susodicho te dice "No se lo digas a nadie" aléjate, y ve y cuéntaselo a quien más confianza le tengas.


Así que estas son las cuatro reglas básicas. Sí, cuesta un chingo entenderlas y ponerlas en práctica. Pero en estos casos, yo pienso que lo mejor es simplemente desaparecerse y olvidarse de esa persona. No vale la pena perder el tiempo con alguien a quien de entrada te dice con sus actitudes que no le interesas. 

sábado, 3 de septiembre de 2016

Exigente en el amor

Muchas personas piensan que soy muy exigente en el amor. No sé a qué se refieren por ser exigente. Tal vez creen que busco a un hombre guapo y millonario. No, no es eso lo que busco.

Lo que busco es a un hombre que desde el primer momento me mire con admiración y ternura. Alguien que me hable con respeto, caballerosidad, dulzura. Alguien que no quiera mantenerme como algo clandestino, como un secreto, sino que se sienta orgulloso de mostrarme ante los demás como su pareja. Alguien que me busque no por simples mensajes por Whatssapp, sino por teléfono, una llamada, que me invite a salir. Alguien que admire mis logros, mi personalidad, mi belleza. Alguien que respete mis decisiones y mi forma de ser y que aún así, quiera permanecer a mi lado. Alguien que sea divertido, con quien comparta muchos momentos, pláticas profundas, risas, bailes, abrazos, besos, caricias. Alguien que me sorprenda con un ramo de rosas. Alguien que lea mis libros. Alguien que me regale libros. Alguien que me dedique una canción. Alguien que quiera que yo sea su novia, su esposa.

Eso busco. No sé si a eso le llamen ser exigente.