viernes, 20 de mayo de 2016

Cuento: Cena para uno



Era un poeta, no muy conocido. Alguna vez había publicado un libro del que se vendieron pocos ejemplares. Pero usaba su efímera fama y su habilidad lírica para seducir mujeres en los bares y cafés del centro. Una vez que las conquistaba y las llevaba a su apartamento, preparaba una mesa con todo lo que sería una cena romántica. Sacaba la vajilla de porcelana y los cubiertos de plata. Ponía servilletas blancas perfectamente dobladas en forma de cisne. Colocaba además un juego de copas de cristal y una botella de vino. No podían faltar los candelabros con velas rojas y encendía además un par de inciensos. Encendía su estero y colocaba un cd de música clásica. Todo para disfrutar su platillo especial, su víctima, quien se daba cuenta del engaño justo antes que él le clavara el cuchillo para degollarla.