sábado, 8 de noviembre de 2025

Aprendiendo a tocar el piano

 Creo que no lo había contado, pero desde hace 8 meses más o menos que estoy yendo a clases de piano. 

Desde muy joven ese era uno de mis sueños, aprender a tocar el piano, sin embargo no fue sino hasta ahora que me propuse a conseguirlo. 

Y es que aunque tengo un teclado que compré hace más de veinte años, nunca llegué a utilizarlo, lo tenía siempre guardado. Intenté, claro, aprender por mi cuenta, compré libros de métodos, pero yo sentía que mi técnica no era buena y al final lo abandonaba. 

Este año, sin embargo, en una publicación de instagram vi anunciada unas clases de piano y como estaban muy cerca de mi casa, me animé por fin. 

Y la verdad me gusta mucho. Es muy retador, lo sé. Ojalá lo hubiera aprendido antes, pero bueno, tampoco es mi intención convertirme en una gran pianista, únicamente lo que deseo es tocarlo para mí misma, y aprender algunas canciones que me gustan. 

Cuando toco el piano, si lo hago pensando en lo que debo tocar, se me enredan los dedos. He descubierto que lo mejor es dejarlo fluir, es decir, no pensarlo, solo disfrutarlo. Y también ser un poco más relajada, en el sentido de no temer hacer el ridículo, sino darle teatralidad a las manos, como las caricaturas de Tom y Jerry, cuando el gato Tom toca el piano. Cuando lo hago así, curiosamente es cuando sale bien el sonido, jajaja. Increíble. 

Todavía no paso de la mitad del libro de enseñanza básica, estoy aprendiendo despacio y lo bueno es que la profesora lo combina con solfeo, para aprender a leer las partituras. 

En fin, ya puede decirse que además de escritora y pintora, también soy música. 


jueves, 18 de septiembre de 2025

Si yo hubiera escrito Betty la Fea 2

 No he visto la nueva serie de Betty la Fea. Sin el autor original, sospechaba que esta segunda parte no iba a respetar la visión de su autor. 

No culpo a los actores por hacerle la luchita. Después de todo, esa novela les dio a todos proyección internacional. Lo que hicieron después nadie lo conoce, al menos no fuera de su país. Además, Betty la Fea es una novela muy querida entre el público, tan es así que ya han pasado 25 años y sigue estando muy vigente en plataformas digitales. La gente ya hasta se sabe los diálogos de memoria, y son de esas novelas "confort" que siempre vuelves a ver una y otra vez a pesar que ya sepas el final. 

Pero en esta época donde los guionistas ya no se esfuerzan en crear contenidos originales sino en sacar segundas o terceras partes de series o películas que fueron exitosas hace décadas, y en el afán de exprimir hasta la última gota de la fórmula, pues era de esperarse que esta nueva entrega iba a carecer del espíritu original de la primera. 

No voy a hablar mucho de la primera versión porque creo que ya se ha analizado hasta el cansancio y si mal no recuerdo, creo que yo misma hablé de este tema en algún post hace años. 

Lo que sí quiero decir es cómo la hubiera escrito yo, si el guión hubiera estado en mis manos. 

Esto es lo que haría: 

Betty lleva 25 años en el liderazgo de la empresa. Armando está enfermo, tiene una enfermedad terminal, un cáncer. Betty se ve dividida, entre seguir al frente de una empresa o cuidar de su esposo que tanto ama. 

Al final Armando fallece. Eso deja a Betty devastada, tanto que se descuida en su persona, cae en depresión, y por eso deja de arreglarse y maquillarse. ¿Para qué, si el hombre por el cual ella hacía eso ya no está? 

Entonces se hace una junta de accionistas. Betty quiere dejar la presidencia. Se convoca a los Valencia y a los Mendoza. Llegan los hermanos Valencia. Daniel, con su hijo, (llamémosle Daniel Jr). Y las hermanas María Beatriz y Marcela, ambas solteras. (Marcela nunca superó el rompimiento con Armando). 

Del lado de los Mendoza, llega Camila y Beatriz. (Los papás de Armando sólo aparecen como accionistas, sin intervenir). 

No pueden faltar Nicolás, Hugo,  Patricia y Mario. 

Entonces Betty decide renunciar. El problema es a quién le van a ceder la presidencia. Y aquí es donde empieza la guerra de poder entre Camila y Daniel Jr. Ambos ambiciosos, con visiones diferentes. Aquí entrarían en juego temas financieros, como expansión de la marca, renovación de imagen, introducción en mercados extranjeros de Europa y Asia, rediseño de producto, etcétera. Quizá Camila apostaría por una línea más moderna, acorde a los nuevos tiempos. Quizá Daniel Jr. apostaría a lo clásico. 

Ambos estarían aconsejados por sus respectivos padres y tíos. Y entre toda esa guerra de poder, surgiría el amor entre ellos. Una relación de enemies to lovers. 

Al final, terminaría asi: 

Betty haría un nuevo proceso de autodescubrimiento. Superar su duelo, volver a amarse a sí misma. 

Marcela y Betty por fin harían las paces y se verían como amigas. 

Ni Camila ni Daniel Jr quedarían en la presidencia, por ser demasiado jóvenes. Sería Marcela quien asumiría la presidencia, pues para ese entonces ya se sentiría más segura en ese puesto, con más experiencia y conocimiento y también por cumplir con el legado de sus papás. 

Marcela encontraría el amor en algún hombre bueno, puede ser algún abogado, o algún economista que la impulsó a encontrar el liderazgo que le faltaba. 

Nicolás y Patricia, obviamente se casarían. 

Betty dejaría el rencor de años y perdonaría también a Mario. Y después se iría a Cartagena, a reencontrarse con Michel y darse por fin la oportunidad de amarlo. 

Y mientras, Camila y Daniel Jr. se casarían, y entonces los Mendoza y los Valencia por fin serían una familia completa. 

Ese sería mi idea. 

No incluyo aquí al cuartel de las feas porque siento que salen sobrando. Quizá en todo caso, a la única que pondría sería a Aura María, quien a lo mejor para ese entonces ya estaría ocupando alguna gerencia, tal vez la Gerencia que antes ocupaba Gutiérrez, pues  ella siempre demostró ser una trabajadora muy eficiente, superando a Freddy, pero este la apoyaría en sus nuevo puesto. 

En fin ¿que les parece mi idea? Se aceptan comentarios. 

miércoles, 9 de julio de 2025

Música del futuro

 Le pregunté a ChatGPT si podía predecir qué tipo de música estaría de moda dentro de 15 años (o sea, en el 2040) y me respondió esto: 


Predecir con exactitud qué tipo de música estará de moda dentro de 15 años (en 2040) es difícil, pero sí se pueden identificar algunas tendencias actuales y factores sociales y tecnológicos que podrían dar forma al panorama musical futuro. Aquí te dejo una proyección razonada:


🔮 Tendencias que podrían definir la música en 2040

1. Fusión global de géneros

  • Los géneros seguirán mezclándose: ya vemos reguetón con pop, k-pop con rap, flamenco con electrónica.

  • En 2040 podríamos tener géneros híbridos como AfroTrapAmbient, SynthFlamenco, o NeoBolero-Rap.

2. Dominancia de lo visual e inmersivo

  • La música probablemente se consumirá en experiencias inmersivas (VR/AR).

  • Los artistas podrían crear "álbumes virtuales" en los que no solo se escuche música, sino que se "experimente".

3. Artistas virtuales y música generada por IA

  • Los artistas virtuales como Hatsune Miku o FN Meka son solo el comienzo.

  • En 2040, la música generada parcialmente o totalmente por IA podría estar en los rankings, tal vez con colaboración humana.

4. Personalización extrema

  • Algoritmos podrían componer música "a la carta" en tiempo real según tu estado de ánimo, actividad, clima, etc.

5. Vuelta a lo humano y lo acústico (contracorriente)

  • Como respuesta al dominio de lo artificial, podría surgir una moda de música 100% acústica, grabada en una toma, sin autotune ni efectos.

6. Revival y nostalgia digital

  • Las generaciones futuras podrían revivir géneros de los 2000s o 2010s, como el pop punk, hyperpop, EDM o incluso trap, remezclándolos con estilos nuevos.


🔊 ¿Y qué podría sonar?

Ejemplos especulativos de géneros populares en 2040:

  • NeoTribal Bass: Música electrónica con percusiones de raíz africana y latina.

  • Post-AI Jazz: Jazz compuesto en colaboración con IA, con estructuras que cambian en vivo.

  • Metaverse Pop: Pop diseñado para conciertos virtuales, con efectos sonoros envolventes.

  • EmoDrill: Letras emocionales con bases agresivas estilo drill o trap oscuro.

  • Biomúsica: Canciones creadas a partir de tus datos biométricos (latidos, respiración, etc.).



Bueno, esto sí está interesante debatir, porque en YouTube ya abundan los videos generados por IA, donde mezclan voces de cantantes actuales para ponerlos en pistas generadas por IA. Las leyes de Copyright se están quedando atrás en esos temas. 

Porque una cosa es "revivir" a John Lennon o Michael Jackson y ponerlo a "cantar" una canción inventada por un algoritmo, y otra suplir totalmente la figura del cantante. 

La música está dejando de ser una experiencia sensorial y emocional para convertirse en un mero adorno de un video de tiktok de 15 segundos. Las plataformas de streaming, si bien nos permiten escuchar un amplio catálogo musical, nos arrebató la experiencia de comprar el disco como objeto material y de arte. 

Suena interesante que también, el mismo ChatGPT prediga el movimiento contrario, música acústica, generada 100% por humanos, como contracorriente a lo que se avecina. 

Me pregunto entonces qué escucharán los niños de hoy cuando se conviertan en adultos. Guardaré este post y me regresaré dentro de 15 años a ver si las predicciones se volvieron realidad. 






martes, 8 de julio de 2025

triunfos perdidos

 Tal vez sea la edad, o que me encuentro en una fase donde todo me resulta carente de interés. Y no se trata de que la vida ahora sea rutinaria, de hecho últimamente amo la rutina. Ya no me gustan los sobresaltos, las cosas inesperadas, los cambios que ocurren de golpe. 

Pero hay veces que simplemente me siento algo vacía, sin nada que contar ni nada qué decir. Bueno, sí tengo cosas que contar, pero son cosas literarias, lo que tiene que ver con lo que escribo o pienso. Pero en este mundo se valoran más las experiencias personales y esas no las tengo. 

A veces veo perfiles de personas que tienen una enorme experiencia laboral. Gente que ha sido líder, emprendedor, gerente, directivo, presidente. Mujeres que han estado en la cima de empresas, que tienen puestos gerenciales muy altos y que son muy reconocidas. Y pues yo nunca he estado a ese nivel. O sea, sí soy una persona muy capaz, pero las circunstancias de la vida me han llevado a caminos más modestos, menos brillantes. Tampoco es que aspire a eso. Si alguna vez ambicioné esos puestos fue a los 25 años, y en ese entonces me estresaba mucho el saber que no podía alcanzar esos puestos mientras que otras personas a bases de palancas y lambisconería los lograban. 

Pero a estas alturas de la vida, ya no me interesa. De hecho, si por mí fuera, si tuviera el dinero suficiente para vivir el resto de mi vida, ya no trabajaría, o si trabajara serían cosas sencillas para entretenerme. 

Sin embargo a veces me pregunto ¿soy una promesa perdida? ¿un talento que no logró despegar? ¿Por qué la vida se mide a base de triunfos? 

lunes, 19 de mayo de 2025

Antisocial

 Me estoy dando cuenta que me estoy volviendo antisocial. O sea, ya no salgo tanto como antes. Bueno, de por sí nunca he sido super extrovertida que digamos, siempre he sido algo tímida. Pero antes por lo menos me obligaba a mí misma a convivir con la gente, a buscar la fiesta, la salida con los amigos. 

Pero luego como que me cansé de ese esfuerzo. Especialmente perdí ese entusiasmo durante la pandemia. Ahora paso mis fines de semana solitaria, hago planes conmigo misma. Si quiero ir a tomar un café, voy sola. Si quiero ir a una tienda, voy sola.

Claro que tengo pocos pasatiempos, pero mis pasatiempos por lo general son solitarios, no involucran gente. 

Por un tiempo iba a clases de dibujo, y ahora voy a clases de piano. Lo sé, no son la gran maravilla. No vivo grandes aventuras. 

Me quedo con ganas de encontrar al príncipe azul que me saque de la rutina y me lleve a conocer mundos diferentes. ¡Pero es que ya tampoco tengo ganas de salir a buscarlo! ¿No sería más fácil pedirlo por paquetería en Amazon? jajaja. Que me lo traigan a la puerta y listo. 

Ayer estaba viendo una página de una agencia de viajes, pensando qué país me gustaría visitar. Tengo 3 destinos en mente: Europa Oriental, Japón o Canadá. 

De los 3 Canadá es el que me sale más económico. Pero todavía no me animo a hacer ese gasto. No sé, mientras me la seguiré pasando igual, entre libros, café, música, soledad.