Últimamente me siento muy agüitada por el tema del dinero.
Desde hace cuatro años soy freelancer. Lo decidí porque de verdad quería tener mi propio negocio, ser dueña de mi tiempo.
Al principio todo pareció ir bien, pero con el paso del tiempo me ha tocado lidiar con clientes que no pagan, o que exigen mucho para lo que les cobro y si les aumento la tarifa, se van con otro.
En estos días tengo una clienta que me debe 7 mil pesos, y se ha sordeado a mis mensajes y mis llamadas, y neta que me siento muy frustrada y triste, porque ¡es mi trabajo! no es justo que me ignore de esa manera, no es justo que si doy lo mejor de mí, no me pague.
Dirán que mi error fue no haberle cobrado por adelantado, lo sé. Pero es que a veces uno es flexible con el cliente, para mantener su confianza. Sin embargo, al fin y al cabo, estamos en México y la gente no valora el esfuerzo ni el trabajo.
Neta, de verdad me siento muy triste porque yo contaba con ese dinero. Seguiré insistiendo.
Mándenme buenas vibras. Las necesito.
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