Recuerdo cuando escuché la noticia del asesinato de Colosio. Yo era niña, iba en el transporte escolar. El chofer iba escuchando las noticias. "Colosio ha fallecido". Yo no conocía nada de política. Nací en una época donde el PRI era la única autoridad, y donde el presidente se designaba por "dedazo". Por eso resultó bastante extraño que el candidato presidencial fuera asesinado, más extraño resultó la ola de noticias que se generaron en torno al caso, donde se especulaban teorías acerca de que los propios miembros del partido y el presidente de ese entonces eran los culpables. Al final, no se demostró nada. Sólo consignaron a Mario Aburto como el autor material e intelectual.
Esta película retoma estos hechos, pero le da un matiz de ficción. Para empezar, no se mencionan nombres. A los personajes se les denominan por apodos "el licenciado", "el doctor", "el señor presidente". Se plantea un argumento basado en las hipótesis que se manejaron en ese entonces, sin llegar a conclusiones contundentes.
Realmente nunca hubo revelaciones, sólo verdades a medias y secretos a voces. Así que eso es lo que verán en la película. Pero cabe destacar que el argumento es muy bueno, y tiene sus momentos de tensión.
Lo que voy a aprovechar para quejarme de la sala de cine a donde fui a verla. En el momento del climax, donde estan narrando y recreando los moviles del crimen, de repente la cinta daba brincos. Los diálogos estaban cortados, mochos, en momentos de revelaciones importantes. No sé, pero sospecho que como la sala tuvo algo que ver en eso, porque qué casualidad que los cortos previos transmitieron spots del PRI y del partido verde...
Les recomiendo poner atención en la escena final.Un río que lleva agua turbia, y se ven los colores del partido: Verde del zacate, blanco de la espuma que lleva el río, y rojo de la sangre que corre en él. Verde, blanco y rojo. Los colores del PRI.
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