sábado, 5 de noviembre de 2016

Candy Candy

Hace poco la serie anime Candy Candy cumplió cuarenta años de haber sido creada. Yo la verdad era muy niña cuando la transmitían por canal 13 de México, así que a lo mucho llegué a ver solo dos o tres capítulos y todos me parecían demasiado tristes.
Pero ahora me di a la tarea de verla a través de Youtube (ya que la autora y la mangaka están sumergidas en un pleito legal sobre derechos de autor y han frenado la distribución y toda transmisión de la serie en todo el mundo). Bendito Internet que te saltas las reglas...
En fin, después de verla desde otra óptica, me doy cuenta que es una historia maravillosa en muchos sentidos, tanto literario como visual. A lo largo de la trama vemos crecer a Candy, convertirse de niña a mujer, y lucir unos hermosos vestidos, así como contemplar bellos paisajes de Estados Unidos, Inglaterra y Escocia.
Así que daré mi análisis de la serie.
Candy White es una niña huérfana, que fue abandonada de recién nacida en el hogar de Pony. Ese mismo día, otra niña llamada Annie también fue abandonada.
Ambas se crían juntas, pero mientras Candy desarrolla una personalidad fuerte, arrojada y optimista, Annie en cambio crece acomplejada y es miedosa, débil, tímida.
Ambas se prometen que siempre estarán juntas y que jamás se separarán. Por lo que cuando llega un matrimonio millonario con la intención de adoptar a Candy, ésta hace travesuras adrede para evitar ser adoptada, consiguiendo su objetivo. Lo que no contaba es que Annie aprovecha para metérsele por los ojos a la señora y así logra ser adoptada, lo cual le causa una profunda desilusión a Candy, pues su amiga sólo tenía envidia de ella y logró convencer a Candy de quedarse para así ella ser adoptada por los Britter.
Después Candy, mientras llora esa desilusión, conoce a un misterioso chico rubio que toca la gaita y que le dice que es mas bonita cuando sonríe. A partir de ahí, ella se ilusiona con su "príncipe de la colina" y se esfuerza por ser adoptada y así conocerlo.
Después aparecen los Leagan, quienes buscan una niña para que le haga de dama de compañía a su caprichosa y malcriada hija Elisa. Candy reconoce el escudo de los Leagan como el del príncipe de la colina y acepta irse con ellos sin pensarlo, sin imaginar que ahí iniciaría su calvario pues los Leagan son muy malos con ella (con excepcion del padre, quien siempre esta ausente). Elisa y Neil torturan a Candy sometiéndola a abusos y humillaciones constantes y Candy vive una serie de injusticias de las cuales logra sobreponerse únicamente gracias a su buen carácter y temperamento.
Y bueno, después de este largo preámbulo. ¿Qué puedo decir de Candy?
Candy es una chica feminista. Ella sola va creciendo y madurando sin ayuda de nadie. Va sobreponiéndose a situaciones que muchas veces rayan en el peligro y el riesgo a morir. A Candy le pasa de todo, ¡todo! Una vez en un capítulo por poco era vendida como esclava sexual para un burdel donde iban marineros. En otras muchas ocasiones ha estado en el borde la muerte. Claro que la astucia y la valentía de Candy le sirvieron para salir viva de todas esas situaciones, porque nadie viene a salvarla, ella misma tiene que hacerlo. Solamente en contadas ocasiones aparecía un misterioso muchacho vagabundo llamado Albert quien la sacaba de algún apuro, pero no era constante. Sus visitas eran esporádicas y breves pues Albert estaba metido en sus propios rollos existenciales y naturalistas.
Las amigas de Candy generalmente eran chicas débiles, introvertidas y acomplejadas. Annie es un ejemplo de ello, Patty también. Durante la infancia y pubertad, ambas se avergonzaban de que las vieran con Candy, y además, se sentían celosas de que los chicos se fijaran en ella. Annie llegó al extremo de pedirle a Candy que rechazara a Archie para así quedárselo ella. Y después Candy presentó a su amigo Stear con Patty para que fueran novios.
En pocas palabras, Candy tuvo que ceder a sus amigos con sus amigas para que ellas ya no se sintieran tan acomplejadas y tristes. De pura suerte que Candy no sentía interés amoroso por ellos, aunque ellos en cambio sí la amaban. Stear y Archie fueron los verdaderos buenos amigos de Candy, la ayudaban en la medida de sus posibilidades y la hacían reír.
Las amigas de Candy aunque con el tiempo se vuelven más solidarias con Candy, son tan débiles que son incapaces de afrontar sus propios problemas. La gente siempre le dice a Candy "cuida de Annie, porque es muy débil", "Cuida de Patty, porque es muy débil, no es como tu". Y Candy tiene que anular sus propios problemas y necesidades para consolarlas y ayudarlas.
Por otro lado, están los niños que aparecen a lo largo de la historia, en diferentes contextos y lugares. Pero todos tiene como común denominador que son niños traviesos que siempre, siempre, siempre la meten en problemas muy graves. Se le pierden, están a punto de morir, se enferman. Uf, la lista es interminable. Niños y niñas pequeños que hacen amistad con Candy y que la ponen en situaciones que ponen en riesgo hasta la propia vida de Candy. Al final todo se resuelve siempre para bien.
Algo curioso es la gente mayor que se atraviesa en el camino de Candy. Candy se sacrifica mucho para el bien común. Es capaz de quitarse el pan de la boca para dárselo a alguna familia. En al menos dos ocasiones logra ablandar el corazón de algún hombre amargado, y así también ayuda a los delincuentes a pesar de que tengan problemas con la ley, pues ella siempre se conmueve de la gente.
Volviendo al tema de los Leagan, es una familia nefasta y cruel. Siempre buscan la ocasión para humillarla y cometen muchas injusticias con Candy. Lo que más detestan es que a pesar de las injusticias, no logran doblegarla pues Candy siempre sale optimista (no triunfante), pero sí con una sonrisa y buena cara a la vida. Creo que una de las peores injusticias que cometieron con Candy, entre muchas otras, fue que lograron que la echaran del hospital en el que trabajaba como enfermera y que ningún otro la contratara. Al final Candy se tuvo que conformar con trabajar en una clinicucha para gente pobre atendida por un doctor borrachín pero amable. ¿Pero qué va de haber sido una gran enfermera que atendía en cirugías mayores a inyectar vacunas y poner vendajes a niños pobres? Ahí siento que la escritora de plano no le dio a Candy el final que necesitaba, donde ella ya se realizaba como una gran enfermera.
Y dejo el tema del amor como último porque es el más complejo y el que más polémica ha causado entre los fans. Como sabemos, el primer gran amor de Candy, Antonhy muere al caer de un caballo. Uf, este fue uno de los episodios más tristes de toda la historia. Después viene Terry, su segundo gran amor.
Y este merece un capítulo aparte porque a pesar que es un personaje secundario se comió la trama. Los fans no superan que Candy y Terry hayan terminado, y aún existe un debate entre quién ese mejor para Candy, si Terry o Albert.
¿Por qué Terry sería el gran amor de Candy? Porque fue el único que le movió la hormona. Con Terry Candy experimenta sensaciones nuevas, apasionadas. Mientras que Anthony era todo dulce y delicado, Terry era arrebatado, igual que ella. La escena donde la besa es un tipo de escena que nunca he visto en otro anime, porque en la cultura japonesa los besos son algo muy esporádico, a escondidas. Si vemos una escena de un beso es larguísima y demasiado cursi porque los personajes tardan años, siglos en tocarse sus labios, y cuando se besan es un beso demasiado rosa y delicado. En cambio el beso entre Terry y Candy es robado, pero demasiado intenso y apasionado. Y aunque inexplicablemente terminan dándose de cachetadas (lo cual hasta resulta medio cómico), no se puede negar que ese beso despertó la sexualidad de Candy, porque a partir de ese momento ella empieza a fantasear con él y él a su vez, no puede olvidarla. Se buscan a lo largo de la trama sin poder encontrarse y cuando se encuentran es por periodos muy breves. Mantienen una relación a distancia en la que se escriben cartas de amor y Candy siempre está soñando con él, se ruboriza cuando alguien la descubre. Se imagina a sí misma abrazándolo y acariciándolo. En pocas palabras, ella arde en deseos de ser su mujer, de cocinarle, de cuidarle, de amarle. Y él a su vez, también piensa en ella, en hacerla su mujer. De hecho en la escena del reencuentro, Terry se porta divertido y juguetón, y Candy le insinúa que ella esperaba estar en un modo más romántico y ella misma le pide a él que la lleve a su departamento. (No se alarmen. Obviamente es caricatura y sabemos que no pasará nada).
Desafortunadamente para ese entonces está de por medio Susana, una mujer que se obsesiona con Terry y se encapricha con él, al punto de meter intrigas y esconderle la correspondencia. Y cuando finalmente Candy y Terry van a encontrarse, Susana salva a Terry de un accidente y pierde la pierna y la madre de Susana obliga a Terry a casarse con ella "porque es su culpa".
Y sí, ahí viene el gran rompimiento entre Terry y Candy, porque ella ve que Susana sin Terry es capaz de suicidarse y Candy no podría con eso en su conciencia. Y una vez más sacrifica su propia felicidad en favor de otra gente.
La escena del rompimiento entre Candy y Terry es una escena tristísima, que muchos fans no superan aún, porque él aún la ama, con toda su fuerza. Pero la autora decidió que esos dos personajes no debían quedar juntos, así de simple.
Y aunque Albert es el último amor en la vida de Candy, de un hombre maduro y estable (y que resultó ser, al final de cuentas el príncipe de la colina, cerrando con ello un círculo en la historia), no queda muy en claro sus sentimientos en el final. Albert es el tío William, el que adoptó a Candy de niña. Así que se vería muy raro que un padre adoptivo se case con su adoptada. ¿no creen?
No se puede negar que Albert es un hombre bueno, atractivo, educado y amable. De hecho es un buen partido para Candy. Pero la autora nunca nos dio motivos para dejar de querer a Terry, porque él siempre amó a Candy. Al menos lo hubiera pintado como un tipo que le puso el cuerno y que le rompe el corazón a Candy y no como una víctima de las manipulaciones de Susana. Pero no.
En fin, la historia está así
Pero en conclusión, ¿me gustó Candy? Por supuesto que sí. Me gusta que se trate de una chica que sin perder su feminidad, luche por sus ideales, y logre salir adelante y estudie una carrera profesional. Me gusta que se sobrepone a los prejuicios y se hace respetar en un ambiente dominado por hombres. En la actualidad siento que a los personajes femeninos a fuerza los quieren masculinizar, quieren hacer a las mujeres guerreras sanguinarias y machorras, cuando en realidad la fuerza de la mujer está en tener temple, en amar, en ser compasiva y empática con las necesidades de la gente y en el deseo de superarse por sí misma. Eso es Candy Candy.






1 comentario:

Unknown dijo...

hola, me gusto mucho la reseña que hiciste sobre candy. Y sobre el crecimiento de candy como persona (madurar) me acorde de un dorama que acabao de ver: moon lovers scarlet heart ryeo, ojala tambien lo vieras si te llama la atencion ver telenovelas coreanas. Que se salen del estereotipo de las novelas latinas, saludos

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